Desde mi pequeño rincón en mi nueva habitación puedo leer, escuchar música y sobre todo meditar.
Apago todo, enciendo una vela, incienso, música y en el silencio de la noche me pongo a leer y luego a meditar un ratito y me considero una mujer muy afortunada..
De esta manera, caminando, meditando, leyendo, cocinando, limpiando, estudiando, pensando, observando la naturaleza, relacionándome... voy descubriendo y sintiendo que es un regalo estar viva, que hay una cosa clara, que hay vida antes de la muerte ¡VIVAMOSLA!.
Que bonito, Marilo...
ResponderEliminar¿Has estado curioseando por la ventana de mi casa? Si ya lo sabia yo...deberia haber puesto cortinas !
Lo que descubres se parece sospechosamente a mis mejores momentos conmigo misma, esos que le permiten a una crecer, aprender, reflexionar... y si, disfrutar enormemente de saberse VIVA.
Enhorabuena por tu blog, te seguire la pista!
Prunus.